Cumplir con la ley

La Locutora, en otro discurso y desde la Escuela de Gendamería, puso en funciones un operativo llamado Centinela.
En el discursos que comenzó muy formal terminó como el culo porque se metió nuevamente con los medios de comunicación y con los Jueces.
Que la prensa destaque las cagadas del gobierno está muy bien, si no es por ellos jamás sabríamos lo que hacen a escondidas del pueblo, eso le molestó siempre al finado, entronizado como el espíritu del peronismo, y le molesta a la Locutora.
Pero criticar a los Jueces que no detienen a los que atentan contra las policía, cuando la policía por orden de ella protege a los delincuentes, es un grado de caradurismo que subleva.
El Juez Rafecas ordenó el desalojo del predio del club Albariños, pero ella que se queja que los jueces no actuan, NO LE HIZO CASO. DESOYÓ ESA ORDEN.
La incoherencia que caracteriza a esta gente, que pone a una montonera que actuó en actos de sabotaje y ataques a fábricas, como jefe de Policía, es una provocación superlativa.
Que la Locutora no le falte el respeto a la ciudadanía, que no crea que le van a dar el Premio Nobel a la Paz.
Lo que debe hacer como funcionaria pública es cumplir con la orden del Juez y mandar a la fuerza pública a desalojar el predio okupado por delincuentes.
Cumplir la ley es la premisa principal de todo Estado que se precie de democrático.
No cumplir con la ley y desoir un mandato de la Justicia, es subversión, quizás este más acostumbrada a esto último, pero se equivoca.
El pueblo argentino es paciente pero no es estúpido y lo que espera es que el gobierno respete la ley y la haga respetar.