Idiotas últiles (o inútiles per se)

La guerra emprendida por los que pretenden independizarse en la zona de Chechenia, está basada en el odio al enemigo, lo que sería normal, pero además en el odio a si mismo.
Inmolarse por una causa, no sólo no es inteligente, sino que además pone de manifiesto el grado de cobardía de los líderes.
El líder lidera con el ejemplo, pero los chechenos no hacen gala de eso, como no lo hacen tampoco los de Al Qaeda, cobardes por definición.
Instruyen a gente ignorante y de poca voluntad para superar los escollos que la vida les pone a diario, para inmolarse en nombre de una causa que de triunfar, cosa totalmente imposible,únicamente dejaría a los líderes en condición de disfrutarla.
Los jóvenes chechenos muertos en enfrentamientos son seguidos por familiares que quieren honrar sus memorias y se explotan cuando están adentro de un omnibus repleto de gente, un acto cobarde por naturaleza.
El tipo que pone una bomba es un cobarde y el que la pone atada a él es un imbécil además de cobarde.
No es de valiente ser una persona-bomba. Quienes lo hacen demuestran un elevado grado de desequilibrio emocional.
Nadie en su sano juicio puede perder la vida en nombre de un dios (con minúsculas) porque el que se escribe con mayúsculas es el Dios del amor y el perdón.
Quienes abusan de la ignorancia de esa pobre gente son individuos execrables y no deben vivir en sociedad. Ninguna sociedad normal los aceptaría en su seno y es por ello que deben vivir escondidos como las ratas.
Perder la vida por un ideal o en la lucha por la independencia es una contingencia que no debe descartarse. Pero hacerlo exprofeso es una imbecilidad.
Seguir viviendo es la consigna en toda guerra, sobrevivir y gozar del cambio conseguido es el objetivo principal, los que mueren por seguir lo que los seudo lideres les ordenan, son los idiotas útiles, que en el fondo son personas inútiles porque no saben convivir.