lunes, 7 de julio de 2008

Un triunfo de la democracia

El pueblo no gobierna ni delibera sino a través de sus representantes.
Esto dice la Constitución Nacional.
Claro que hay que analizar si los que están ocpupando una función en el Congreso, son verdaderamente representantes del pueblo. Que los votaron, los votaron, no hay dudas, pero eso es la parte técnica, la que se ve.
Más de un diputado oficialista se ufana al decir que fue un triunfo de la democracia. ¡¿?!
Yo me pregunto, el hecho de estar ocupando una banca ¿acaso no es un acto de la democracia?
En buena hora se dan cuenta que el Congreso está para legislar, para crear leyes, ese es el trabajo de los congresistas.
Un triunfo de la democracia. ¡ que gran frase !
¿Cuando votaron la ley de los superpoderes, en que estaban pensando entonces?
¿Acaso creyeron que al que le dieron todo el poder, no lo iba a usar?
Esos artilugios legales para evitar el tedioso proceso de negociar y negociar, no deben ser utilizados jamás.
El Poder Legislativo está para legislar y el Ejecutivo está para hacer aplicar las leyes y el Judicial para juzgar su correcta aplicación. Así de sencillo.
Si el Ejecutivo quiere legislar, entonces que ocupe una banca en el Congreso y lo haga en el lugar indicado, mientras tanto que se limite a administrar y hacer aplicar las leyes.
Si el Congreso o mejor dicho, sus diputados o senadores, quieren tener una beca durante su mandato, entonces que se anoten en algún plan de ayuda que se ofrece para los desocupados, pero que vayan a hacer huevo a otra parte.
Un triunfo de la democracia. Claro que es un triunfo de la democracia.
Pero no es justamente por iniciativa de este gobierno haberlo logrado.
¿Que pasó? ¿De golpe les agarró un ataque democrático y de institucionalidad?
Los diputados oficialistas enarbolan la bandera de la democracia, al tratar estas leyes de las retenciones y no advierten que en vez de exaltar la acción del Ejecutivo, lo que hacen es poner en evidencia la intolerancia y el sentimiento poco democrático que tiene el tándem.
¿Porque no la enviaron hace 120 días al Congreso?
Los diputados oficialistas festejaron con abrazos y papelitos el haber obtenido más votos que la posición.
Yo me pregunto ¿que festejaban? ¿El triunfo personal, el ideológico, el de haber hecho un acto de patriotismo? No se comprende la actitud, igual se hizo cuando se festejó dejar de pagar la deuda externa. Después vino la noche para el pueblo, no para el FMI que cobró hasta el último centavo, después de los encendidos discursos de Capricheytor en su contra.
¿A quien vencieron?
Un triunfo de la democracia. En hora buena.

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