miércoles, 16 de septiembre de 2009

Ley de Medidos Audiovisuales

Hoy asistimos a un nuevo atropello provocado por el gobierno K y sus alcahuetes circunstanciales.
Ya desde anoche, durante el tratamiento del proyecto en Comisión se veía venir la actitud de hacer pasar el tiempo entre palabras y palabras, pero ningún oido.
La oposición se desgastó en fundamentos técnicos, reglamentarios, éticos, etc, etc pero el oficialismo que se pasa los reglamentos y leyes por donde no el sol y de ética nada sabe, solamente estaba presente, más cuidando que la tropa no se desbandara que para otra función.
Durante la sesión en la Cámara de Diputados, las cuestiones de privilegio abundaron en las primeras horas, curiosa manera de protestar, civilizada manera de hacerlo, donde un tipo de desgañita hablando, mientras los otros, especialmente los del oficialismo no escuchaban o hablaban entre ellos. Finalmente todo pasa a la comisión de asuntos institucionales, esa tan cara para la Locutora (de la boca para afuera).
La ley encierra un trampa que solamente se podrá ver en toda su dimensión cuando comiencen a vencer las licencias actualmente en vigencia.
Mucha gente quedará en la calle, muchos periodistas, choferes, sonidistas, electricistas, etc, quedarán en la calle y ¿y quienes quedarán adentro?, los amigos del Capricheytor y él mismo a través de uno o varios testaferros.
La ley atomiza el negocio y desarticula a una enorme cantidad de medios de comunicación, de maneraa tal que las empresas se verán en la necesidad de despedir a sus empleados.
Asimismo, la ley K, al desarticular a los grupos empresarios, bajo el título de monopolios, transformará al territorio nacional en un inmumerable entrecruzamiento de ondas de radio y de TV, emitidas por muy pequeñas empresas que no tendrá la posibilidad de emitir más allá de 50 km de su base, entonces la gente quedará a merced de lo que unidireccionalmente les hagan llegan mediante la retransmisión de noticias desde el canal oficial. Se habrá conformado entonces un monopolio de la información desde el propio Estado, la URSS, China, Corea del Norte, Iran, Irak, etc, ya conocen este sistema.
La Locutora cree que con repetir una y otra vez que la ley es democrática, hace que la ley sea democrática. No es así como una ley se hace democrática. Una ley lo es cuando es debatida siguiendo todas las normas establecidas para la creación de las leyes y esta precisamente carece de esos pasos.
Un nuevo atropello en contra de los derechos de los argentinos.

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