Los únicos privilegiados son los niños

Los únicos privilegiados son los niños, esa frase dicha hace muchos años por alguien muy cercano o no al pensamiento de la Locutora, parece no ser correspondida por los gobiernos provinciales de igual pensamiento político, o parecido al menos.
En 15 provincias no empiezan las clases porque el gremio docente quiere más plata y el gobierno no se la da.
¿Que paradoja, no?
Cuando la Locutora se esfuerza por hacer trascender en sus discursos que la inclusión y la distribución del ingreso o de la riqueza es lo primordial, los gobiernos provinciales peronistas, no comprenden que deben aflojar sus alforjas y pagar mejor a los maestros.
¿En que quedamos?
Pero claro, si le aumentan al los maestros tendrán menos plata para la campaña y este año es más importante la campaña que otra cosa.
Yo me pregunto, cuando hacen el presupuesto ¿ no destinan una cantidad determinada para el gasto público? ¿Entonces cual es el problema de aumentar los sueldos, si ya lo tienen aprobado?
¿O será que lo ponen en un rubro para después realocarlo en otro para usarlo en un destino diferente? Los superpoderes, que le dicen.
El gobierno de la Ciudad Autónoma no le va en saga, en el fondo son todos iguales.
Ahora, si hacemos un censo de verdad para ver cuantos maestros hay y cuantos trabajan de verdad, creo de debiéramos incorporar un montón, mucho vago en la actividad que cobra sin laburar bajo la escusa de problemas sicológicos o casas por el estilo. ¡Si Sarmiento se levantara!