Imberbes eran los de antes

El grado de impopularidad que tiene el gobierno ya es alarmante. A tal punto que no se atreven a hacer una concentración pública en apoyo de si mismo. Harán una, pero de noche, porque de noche todos los gatos son pardos. El sistema que otrora les diera resultado al tándem presidencial, ahora quedó superado porque la gente que vive en capital y el resto del país, no es igual a la que vive en Santa Cruz y que los soportó durante muchos años, sin chistar. Ni la oposición chistaba. Ahora la gente se da cuenta que quienes nos gobiernas no son idóneos para ello y tampoco quiere que le metan las manos en los bolsillos y tampoco quiere les mientan más. Se gastarán miles de millones en el tren bala y la red de ferrocarriles que usa la gente, que ellos dicen defender, es una verdadera porquería. Y como si fuera poco, ahora tenemos nuevos imberbes. Primero pegan panfletos, infantiles panfletos, para denostar al gran diario argentino y después se hacen las víctimas cuando se los despegan. Hacen una improvisada conferencia de prensa para leer, otro panfleto y se equivocó treintaycinco veces. La minita a la que le dijeron que leyera, está más para trabajar con Pancho o bailar por sueño que para hacerse la defensora de intereses que seguramente ni entiende. Pero lo pero es que esa juventud, a la que le llenan la cabeza, con vaya a saber que ideas, son los incipientes imberbes del futuro. ¿Tendrá la conciencia tranquila la persona que los usa para intereses personales encubiertos en una supuesta pelea por la Patria? ¿Quien los echará de la plaza , la que ganó las últimas elecciones presidenciales o el marido en funciones de presidente?